15 Jul La irrupción del metaverso en la educación infantil
Si algo caracteriza conceptualmente al desarrollo tecnológico es, por un lado, la innovación. Y, por otro, la disrupción, o la capacidad para plantear escenarios totalmente alejados —y a veces contrarios— a los establecidos normalmente. La tecnología lleva décadas transformando aquellos sectores que son motores del cambio social, sobre todo económico. Pero ya hemos hablado aquí de cómo las TIC, y en concreto la conectividad móvil, puede afectar positivamente a sectores como el educativo.
Pues bien, otra de las características de la transición digital es que no se detiene. Y el próximo paso es el metaverso. Aunque la educación lleva experimentando con entornos virtuales casi treinta años, esas experiencias han devuelto resultados positivos, pero rara vez extrapolables a todo un sistema. Quizás desarrollar estrategias educativas para decidir cómo entrar en el metaverso con buen pie pueden suponer para el sector —sobre todo en los primeras fases formativas, con los más pequeños— un deseado cambio de paradigma.
Cómo puede beneficiar el metaverso al sector educativo
Lo que caracterizará al metaverso plenamente desarrollado es su potencial inmersivo desde el punto de vista del usuario y su alto componente de «experiencialidad», aunque sea a través de un avatar y no mediante la interacción directa con el cuerpo o los cinco sentidos. Tanto profesores como alumnos pueden sumergirse en un ecosistema no físico donde explorar y sacar partido a metodologías en las que la vivencia en primera persona puede aportar valor. Por ejemplo:
- Visitas virtuales a espacios de interés o museos.
- Asistencia a conciertos con orientación didáctica.
- Interacción directa con personalidades o docentes en remoto.
- Recreaciones inmersivas de episodios históricos relevantes.
- Intercambios culturales y formativos con alumnos de otros países.
- etc.
De hecho, las instituciones educativas pueden recrear en el metaverso réplicas digitales de sus propios campus al completo, con todas sus instalaciones: aulas, salas comunes, comedores, espacios de ocio, … La idea sería replicar la misma experiencia que obtienen los estudiantes presenciales, añadiendo a los contenidos formativos la misma calidad y prestigio de cada organización, pero ampliando su rango geográfico hasta alcanzar un nivel global.
Metaverso y educación infantil. Oportunidades y retos
Algunos estudios de expertos en pedagogía y educación demuestran que la aplicación de realidad virtual y realidad aumentada a procesos formativos de educación infantil mejoran los resultados de manera estadísticamente significativa. Tal es el caso de la captación y asimilación de conceptos como espacio, distancia, textura, color o volumen. También en la interiorización y réplica de habilidades y herramientas relacionadas con la expresión artística, así como el aprendizaje de conceptos matemáticos simples a través de su representación gráfica, por citar algunos ejemplos. El metaverso podría suponer una mejora notable en este tipo de aplicaciones didácticas.
A pesar de las enormes posibilidades del metaverso, su aplicación efectiva en entornos como los de educación infantil aún deberá superar algunos obstáculos. Unos son de tipo general y relacionados con la infraestructura: capacidad de disponer de un ancho de banda adecuado para la alta demanda de transmisión de datos del metaverso, reducción del precio de los equipamientos necesarios para entrar al metaverso o estandarización tecnológica para su aplicación en realidades educativas de escasos recursos.
Otros problemas pueden afectar específicamente a los alumnos de esta etapa educativa concreta. Tal es el caso del diseño de dispositivos que permitan una experiencia inmersiva de varias horas, sin generar molestias físicas; o la ausencia de contra indicaciones del uso de entornos virtuales como el metaverso de manera intensiva, sin afectar a la percepción de espacios, distancias o a la capacidad para desarrollar la percepción de la profundidad de campo, por ejemplo.
En cualquier caso, el sector educativo siempre ha sido pionero en la aplicación y explotación de los avances tecnológicos en el desarrollo de sus actividades. A buen seguro, el metaverso se encontrará pronto entre su larga lista de éxitos en la transición tecnológica.