Una de las tareas más urgentes que tiene ante sí el tejido empresarial español —especialmente las pequeñas y medianas empresas, además de los autónomos— es avanzar en la transición digital, es decir, en digitalización. Gracias a ella es posible incrementar la productividad, aumentar las posibilidades de ser competitivos en nuevos mercados, facilitar flujos de trabajo a través de la automatización de tareas, mejorar los canales de comunicación interna y externa, modernizar las estrategias de marketing…

Las autoridades públicas y el sector productivo es consciente del camino que aún hay recorrer. Según el Informe La digitalización y el desarrollo sostenible en la PYME en España, publicado por la Fundación para el Análisis Estratégico y Desarrollo de la Pequeña y Mediana Empresa en julio de 2022, tan solo el 22 % de las PYMES españolas cuenta con tecnologías de digitalización avanzadas. A pesar de que está demostrado, tanto el beneficio de la conectividad como la necesidad de digitalizar las empresas, se necesita desarrollar más ese campo. Y financiar ese impulso.

Profesionales de la digitalización para ayudar a las empresas españolas

Los Fondos Europeos NextGenerationEU han hecho posible el desarrollo de un programa que permite a las empresas y autónomos españoles iniciar el proceso de digitalización que necesiten, sobre todo a través del denominado Kit Digital, que el Ministerio de Asuntos Económicos y Transformación Digital ha dotado de más de 3 000 millones de euros. Gracias a este dinero, tanto micro empresas como PYMES y organizaciones de hasta cuarenta y nueve empleados pueden acceder a ayudas que oscilan entre los 2 000 y los 12 000 euros.

Desde que se ha puesto en marcha esta iniciativa la demanda de profesionales de la digitalización se ha disparado. Sobre todo en los terrenos de data science, experiencia de usuario y programación. Así lo aseguran desde Malt, una empresa que pone en contacto a empresas y autónomos con profesionales freelance. Y es que, según la citada organización, es esta modalidad, la del trabajo freelance, el que más se prodiga en los perfiles relacionados con la digitalización y la transición tecnológica. Malt aporta datos que hablan de que su base de datos cuenta con medio millón de freelance y 600.000 clientes en ocho países europeos.

Según Jacobo Bermúdez de Castro, director general de Malt España, «Estos expertos independientes son todos profesionales expertos que tienen una media de nueve años de experiencia en ámbitos como pueden ser las tecnologías de la información, el marketing y la comunicación, especialistas audiovisuales (fotógrafos, videógrafos, técnicos de audio, especialistas en videojuegos), diseñadores gráficos o especialistas en estrategia y consultoría».

Impulso de las administraciones regionales y locales a la digitalización

A pesar de que la financiación europea resulta imprescindible y capital para impulsar la digitalización de empresas, el proceso no terminará de «calar» en el tejido productivo sin la acción decidida de las administraciones autonómicas y locales. Un buen ejemplo, en el caso español, puede encontrarse en Extremadura. Recientemente ha recibido el Premio del Mejor Iniciativa Pública, otorgado por el Colegio Oficial de Ingenieros de Telecomunicaciones y la Asociación de Graduados e Ingenieros Técnicos de Telecomunicación, «por su apoyo al despliegue de redes locales de fibra óptica de mancomunidades de municipios, ayuntamientos y entidades locales menores extremeñas.

 Extremadura presentó recientemente el Digital Innovation Hub, dotado de cuatro millones de euros y constituido como ventanilla única de servicios de formación, tecnológicos para la innovación y de desarrollo de negocio para las empresas extremeñas. También se han llevado a cabo iniciativas con la digitalización como epicentro, tales como la I Feria i-Rural, organizada por Castilla La Mancha y Portugal, que puso de manifiesto la necesidad de poner en valor, difundir y dar a conocer los productos y servicios TIC, que tanto desde el ámbito privado como desde las instituciones y las administraciones públicas se pueden poner a disposición del mundo rural.